Según la Occupational Safety and Health Administration (OSHA), el vuelco es la principal causa de muerte en los accidentes con carretillas elevadoras, representando el 25% de los accidentes mortales.
Se estima que el 11% de las carretillas elevadoras en los Estados Unidos estarían involucradas en un accidente cada año y el desenlace del 42% de los accidentes mortales es debido al saltar el conductor fuera del vehículo cuando estaba volcando y quedar aplastado.
En una situación de vuelco, el impulso instintivo de saltar fuera del vehículo es muy fuerte, a pesar de que lo más seguro es quedarse en su interior, evitando ser aplastado. Y por eso el cinturón de seguridad tiene la función de mantener al conductor en su asiento en caso de que la carretilla elevadora volcara.
En España, el Real Decreto 1215/1997 recoge las disposiciones mínimas para limitar los riesgos de vuelco en carretillas elevadoras:
- La instalación de una cabina para el conductor.
- Una estructura que impida que la carretilla elevadora vuelque.
- Una estructura que garantice que, en caso de vuelco de la carretilla elevadora, quede espacio suficiente para el trabajador o los trabajadores transportados entre el suelo y determinadas partes de dicha carretilla.
- Una estructura que mantenga al trabajador o trabajadores sobre el asiento de conducción e impida que puedan quedar atrapados por partes de la carretilla volcada.
Así que, la próxima vez que monte en su carretilla elevadora, no olvide abrocharse el cinturón: nunca se sabe cuándo sentirá la tentación de saltar.